domingo, 18 de octubre de 2009

Amistades peligrosas


No quiero yo poner en duda la hospitalidad de Julián y Ana, pero que alguien me explique, por Dios, por qué han adornado con cactus (¿o debo decir cactos?) la terraza donde nos han agasajado hoy con un magnífico rosbif... Si además explico que el más hermoso se llama “el asiento de la suegra", ¿qué queréis que piense? ¡Ouch!

1 comentario:

  1. Aclaración urgente: ¿lo de "El asiento de la suegra", es un nombre científico como "Cereus peruvianus var. monstruosus"?. Porque este también me parece oportuno que lo empolle la suegra.

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